La Necrópolis Visigoda de Fuente Alta, datada entre los siglos VI y IX d.C., forma parte del excepcional Complejo Arqueológico del Algarbe, único en la provincia de Granada. Situada a unos 800 metros del conjunto principal, junto al manantial de Fuente Alta que surge de una pequeña cueva natural, conserva actualmente unas 7 tumbas visibles excavadas en la roca y agrupadas en un solo conjunto.
Este yacimiento se enmarca dentro de un espacio arqueológico más amplio que constituye un conjunto monástico rupestre (excavado en roca) con una iglesia rupestre (cueva natural adaptada como zona de culto), un baptisterio rupestre, una necrópolis principal con unas 60 tumbas excavadas en roca distribuidas en 5 grupos, celdas monásticas en cuevas y un ergástulo de carácter penitencial. Se trata de una asociación inédita de todos los elementos propios de una comunidad de monjes y eremitas (personas que vivían en retiro espiritual, aisladas del mundo) dedicados a la vida contemplativa.
Las tumbas son sepulturas rectangulares o ligeramente trapezoidales excavadas en los afloramientos calizos, con un escalón tallado para apoyar las losas de piedra que cubrían los enterramientos. Orientadas suroeste-noreste y agrupadas de dos en dos o de tres en tres, fueron expoliadas a lo largo de los siglos, aunque se hallaron piezas como un broche de cinturón de bronce. Algunas corresponden ya a cristianos mozárabes de época tardomedieval, evidenciando una perduración del uso del cementerio más allá del periodo visigodo. El topónimo ‘Algarbe’ proviene de ‘algar’ (cueva), en referencia a las numerosas cavidades naturales del entorno. El yacimiento, conocido desde 1985, se sitúa en un espacio rico en agua y aislado.
Acceso: Se ubica en las inmediaciones de Fuente Alta, dentro del Conjunto del Algarbe. Se llega a través de caminos rurales y se puede visitar libremente.
