
La Torre de Hernán Pérez del Pulgar fue construida en el siglo XIII como torre de alquería nazarí y formaba parte de la red de fortificaciones que vigilaban el estratégico valle del Genil y protegían las comunicaciones entre Loja y Granada. Su emplazamiento, en el corazón de lo que sería el núcleo urbano de Salar, le confería funciones tanto defensivas como de residencia señorial y centro administrativo de la alquería.
Con una planta rectangular de 7,40 metros de ancho por 9,70 metros de largo, la torre presenta dimensiones notablemente superiores a otras torres de alquería de la vega granadina como las de Romilla, Bordonal o Huétor Tájar, aunque menores que las imponentes construcciones de Lanteira y Ferreira. Construida en mampostería enripiada formando hiladas horizontales, con refuerzo de sillares en las esquinas, conserva una altura de 14,50 metros distribuidos en una probable planta baja con funciones de aljibe, dos plantas de alzada y una terraza superior.
El 30 de mayo de 1486, la torre fue conquistada por el célebre capitán Hernán Pérez del Pulgar y Osorio, conocido como «El de las Hazañas», quien con solo 85 hombres —15 escuderos y el resto soldados de a pie y a caballo— logró doblegar la resistencia de sus defensores a pesar de la superioridad numérica del enemigo. Durante el asalto, Pérez del Pulgar resultó gravemente herido de una pedrada, pero logró culminar la toma y apresó al alcaide Mohamed Almandari. En reconocimiento a esta hazaña, los Reyes Católicos lo nombraron primer Alcaide y Señor de Salar, con una asignación de setenta mil maravedís anuales de tenencia desde el 1 de enero de 1491, iniciándose así el mayorazgo de Salar que permanecería en manos de su familia hasta principios del siglo XX. Hernán Pérez del Pulgar estableció su residencia en la torre y, aunque Fernando el Católico ordenó en 1498 el desmocho de las fortalezas del Reino de Granada para evitar que fueran retomadas por el enemigo, la Torre de Salar se salvó de la destrucción total. Una merced real de 11 de marzo de 1500 concedía las ruinas de la fortaleza a Pulgar para que pudiera levantar casas de labranza y otras dependencias. Junto a la torre se conservó y amplió una casa-palacio que fue residencia de los marqueses de Salar hasta el siglo XX.
En la actualidad, la Torre de Salar, también conocida como Torreón Árabe, constituye uno de los monumentos más emblemáticos del municipio. Se alza frente a la Iglesia de Santa Ana —construida en 1501 sobre una antigua mezquita por iniciativa del propio Hernán Pérez del Pulgar— conformando junto a la casa-palacio de los Pérez del Pulgar un conjunto monumental de gran valor histórico.
Acceso: La Torre de Salar, localizada en el centro urbano de Salar, es de propiedad privada y no es posible visitar su interior. No obstante, puede admirarse desde el exterior en su emplazamiento, junto a la Iglesia de Santa Ana y la casa-palacio de los Pérez del Pulgar. Este conjunto monumental, junto con el Parque Carolina Trassierra Nieto y su mirador, sobre el valle, puede recorrerse libremente.
La torre se encuentra a escasos metros del aparcamiento público próximo a la iglesia.
Más información en la web de Turismo Salar.